Auténtico partido de trámite para el Real Madrid en esto que se ha inventado la FIFA para sacar dinero llamado Mundial de Clubes. Hay nostalgia de aquella antigua Intercontinental en la que se dirimía el mejor equipo del mundo entre el campeón de Europa y el de Sudamérica.
Pero ahí que se presentó el Madrid en Marrakech para jugar las semifinales de dicho evento ante el Cruz Azul mexicano. Y el rival lo intentó, con alguna ocasión clara y un penalti parado por Casillas. El segundo consecutivo de aquel al que retiraban algunos no hace muchos meses.
Para entonces ya habían puesto los blancos el 2 a 0 en el electrónico. Un remate de cabeza de Sergio Ramos tras un magistral pase de Kroos en una falta abrió el marcador. Después fue Benzema tras una excelsa jugada de Carvajal por banda derecha quién anotó el segundo tanto de los madridistas.
Y después a jugar y a cansar a los rivales. Hasta que fueran cayendo los goles. Ya en el segundo tiempo anotaría el tercero Gareth Bale tras un gran pase de Cristiano Ronaldo mientras que Isco cerraría el marcador. El portugués no marcó pero estuvo a punto de hacerlo con una rabona espectacular. Ya tendrá su oportunidad en la final.
El Cruz Azul se fue desarmando con el paso de los minutos y el Madrid tenía cada vez más claro lo que tenía que hacer. Incluso Ancelotti dio descanso al fin a Kroos, que estuvo inmenso, para dar entrada a Khedira. Illarramendi tuvo un par de errores pero necesita estos minutos para asentarse en el centro del campo mientras dure la ausencia de Modric. Mientras tanto Isco volvió a jugar un partido espectacular. Está a un nivel altísimo.
Así, con 4 a 0, concluía el primer partido de los madridistas en esta extraña competición que se disputa en Marruecos. ¿Es rentable para los equipos esta sobredosis de partidos innecesarios? Al menos ya no tienen que viajar al otro lado del mundo.
Ahora falta por conocer quién será el rival del Real Madrid en la final del Mundial de Clubes. San Lorenzo es claramente favorito frente al Auckland City. No deberían tener problemas los argentinos para citarse con los de Ancelotti y disputarse el trofeo que acredita de manera oficial al mejor equipo del mundo en el año 2014.
