La venganza es mala idea
para malgastar la vida,
pero el que no pelea
no necesitará comida.
Así, la absurda batalla,
de no perdonar pasados
mantendrá la muerte a raya
y creará magnos osados.
La historia de Cuarón
sobre astronauta perdida
tiene el foco de atención
en la misma cometida.
Personaje apaleado
por avatares vitales
forma todo el entramado
con supervivencia a males.
En esta se cambia el foco
en la justificación humana.
Preferible era estar loco
por mantener vida sana.
Emmanuel vuelve a trazar
imposibles coreografías.
Ya demostró en ‘Children of men’
Leo sufre como pocos
para conseguir su Oscar.
Llora y escupe sus mocos,
pues por perderlo está mosca.
Alejandro sigue triunfando
con sus fórmulas copiadas.
La épica con voces cantando,
en ‘Gladiator’, ya estaban pasadas.
El mérito está en la técnica
pues es espléndida labor.
Las peleas tienen métrica
y demuestran su valor.
Un ejercicio de estilo
de magnífico trazado.
Pese a mantenerte en vilo,
en historia es algo vago.