Estar solo en el mundo
es un sentir nauseabundo.
Estar solo en un planeta
es acabar majareta.
en un terreno desolado.
Si no quiere acabar muerto
deberá plantar un huerto.
Pero el terreno marciano
es yermo y muy de secano.
No será fácil tarea
llevar a cabo la idea.
Mientras tanto el mundo nuestro
debate algún plan diestro
para devolver al solitario
y caer bien al noticiario.
Ambas tramas en paralelo
harán llevar el camelo
a una aventura increíble
que acaba siendo intangible.
Una triunfal epopeya
de las que USA embotella
para hacer salir del cine
con ilusión que define.
Tiene altibajos de ritmo
que evidencian el timo.
Una fantasiosa historia
que olvidará la memoria.
Que estuviera bien avalada
es soberana chorrada.
Una publicitaria campaña
para vender la patraña.
Entretiene con palomitas
y, en pareja, manitas.