Todo el ego de un artista
cabe en un documental.
Narrando su punto de vista
con gran toque original.
Todo el narcisismo junto
que tú puedas digerir.
Ser artista es un asunto
que te puede hacer reír.
El ficticio empaquetado
no se acerca a lo real.
Está bien documentado
pero no es visión neutral.
Lo enturbia a cada plano
la suntuosa vanidad.
Retrata bien al fulano
pero no es la realidad.
Entre ficciones y sueños.
Sobre pasados sin dueños.
En ocasiones, frunciendo ceños.
Con planificados diseños.
El músico y sus composiciones
son lo más anclado al mundo
que con días a montones
le hizo ser artista fecundo.
El letrista delirante
cuando sube a un escenario
sabe que tiene delante
la catarsis con horario.
Sudando de forma mística,
adores o no su estilo,
hace labores de artista
cuando no está en el vinilo.