Una cena con Bill Murray

Dicen de él que es un trocito de Malasaña en pleno barrio de Salamanca y su clientela sabe apreciar el street art, las ganas de conocer sitios nuevos y auténticos, así como una atención desenfadada y la importancia de alimentarse de manera saludable. Para colmo, Bill Murray es protagonista absoluto en sus paredes.

Hablamos del restaurante Bestia Kitchen & Bar, que nació hace siete meses con una decoración genuina, repleta de detalles y de matices. El local es el fruto de la evolución de la sociedad que forman José Maria Aguilar «Agui», actor y empresario teatral, Tato Repetto —Mr. Hazëlnut, artista de toda la obra y decorador de otros locales de la sociedad, como Gorila y Naif— y Beto Argoitia, experto en marketing y organización de eventos. Los tres buscaban dar opciones novedosas adaptadas a diferentes públicos, con un bar donde sentirse en un decorado único.

Y es que, más allá de la opción gastronómica, disfrutar de una comida o una cena en Bestia merece la pena por perderse entre sus murales, algunos de los cuales se han realizado con la técnica deconstruction. Los diferentes grafitis, así como sus pintadas industriales, son el resultado de la mezcla de varias técnicas, como el stencil, paste up, o el puro uso del convencional espray. Y es ahí donde aparece nuestro Bill Murray, con su inseparable gorro rojo de ‘Life Aquatic’, la deliciosa película de Wes Anderson, con quien el actor conforma un tándem casi perfecto.

Así, saben mejor, si cabe, las ensaladas, los sándwiches, los tacos, las quesadillas, las pizzas de Pizza al Cuadrado y, por supuesto, su especialidad: las hamburguesas. Comida sencilla y casual, al estilo Bill Murray, vaya.

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