Si quieres escribir sobre seres humanos, ten un gato en casa.
-Aldous Huxley-
Ella paseaba con su compañera todos los días a la misma hora. Nunca fallaban. Así había sido los últimos 20 años. Años que se agarraban con fuerza a sus patas cansadas. Con extraordinaria precisión, su paseo se repetía una y otra vez. Sol, viento, lluvia, calor y frío sólo eran compañeros de viaje. Su paseo de la tarde era obligado. Acompasadas, cada una adaptaba su ritmo al de la otra. Maquinaria engrasada por los años y la confianza mutua. Un reloj suizo. El paso del tiempo sólo modificó su paso, cada vez más torpe y pausado. Ella ya no podía ver. Se desplazaba con dificultad por los adoquines grises, resbalando ligeramente sus pezuñas. Su compañera la guiaba entre los bolardos. Sólo podía recorrer un tramo de la calle. La fatiga ahogaba su respiración. Lentamente, su vida se apagaba. Apenas reconocía a las personas con las que años antes había jugado a la pelota. Su vida escribía ya el último capítulo. El final estaba cerca. Ninguna lo quería aceptar, pero era inevitable.
Yo las veía casi todos los días. Eran un recuerdo vivo de Sara. Ella tenía la misma edad que mi gata. De alguna manera, su presencia me recordaba a ella. En simbiosis nostálgica, sentía que algo de Sara sobrevivía mientras ella siguiera dando ese pequeño paseo diario.
Un día dejó de salir. Tuve miedo de preguntar a su compañera si seguía con vida. Sentía que si su vida se apagaba, Sara marcharía definitivamente. Su recuerdo sólo sería un susurro en mi cabeza. Aún tengo miedo de olvidar los recuerdos. De olvidar todo lo que me dio. La vida se construye sobre las ruinas del pasado. La nostalgia es los cimientos de nuestro presente, enterrando el dolor, cubriéndolo con una pátina de ligera felicidad.
Pasaron los meses y nunca la volví a ver. De alguna manera, sabía que ya había dado el paso al otro lado y con ella una parte de Sara. Ahora las dos descansan. Ya no pasearán solas. Ya son parte de nuestros cimientos. DEP.
La ilustración que acompaña a este artículo es de Daniel Crespo.
