Ciencia. Esa gran desconocida para muchos de nosotros y que despierta tanto interés como recelos en según qué sectores de nuestra sociedad. La respuesta para unos, el origen de todos los males para otros. Bien… Pues hablemos de ciencia. Y empecemos esta primera entrega de este nuevo y apasionante proyecto dedicando unas líneas a las grandes incógnitas para las que aún la ciencia no tiene respuesta. Son muchas, quizá demasiadas. En algunos casos son numerosas las respuestas, que para el caso viene a ser lo mismo que no tener ninguna. Demos un repaso fugaz (ya tendremos tiempo más adelante de discutir en detalle) a las que podrían resultarte más interesantes, quizá no las más relevantes científicamente hablando, pero seguro que despertarán tu interés. Para la primera entrega, mi incógnita favorita: las grandes extinciones masivas.
Seguro que lo primero que te viene a la mente es la peli de ‘Parque Jurásico’ y la famosa extinción de los dinosaurios. Ya sé lo que estás pensando: ¿pero qué me está contando este tío? Si todo el mundo sabe que fue un meteorito… Bien, pues para empezar no fue una sino que fueron cinco las grandes extinciones, y sí, una fue la de los grandes reptiles. Lo que quizá no sabías es que la llamada “gran extinción” o “período de la muerte” (chan chaaaan) ocurrió a finales del Pérmico y principio del Triásico (situémonos: hace unos 248 millones de años), y provocó la desaparición del 96% de las especies sobre el planeta. Dale al coco, analiza el dato… ¡96%!Eso quiere decir que todas las especies que habitamos nuestro planeta descendemos de aquel 4% de especies que sobrevivió. Vaya…
Muchas teorías (meteoritos, erupciones volcánicas y gases tóxicos lanzados a la atmósfera, grandes terremotos, caída de los niveles de oxígeno en la atmósfera…) pero ninguna certeza. Algunas teorías dignas de novela, la que más me gusta es la llamada Teoría del asesinato en el Orient Express, y que más o menos viene a dejar contento a todo el mundo, porque asegura que todas las teorías posibles son ciertas, y además que todas ocurrieron encadenadas y en un periodo de tiempo muy corto (1 milloncejo de años, que ahí es nada). ¡Ah! y para que lo tengas en cuenta… la extinción del Cretácico (sí, esa es la famosa que acabó con los dinosaurios, no me importa cómo se llame la peli), ocurrió después de ésta. Éramos pocos y parió la abuela. Silencio dramático y música de violines, momentazo Milenio 3.
Pues esto, amigos lectores, es sólo un aperitivo para arrancar motores. Mensaje para la reflexión: de todos los que podríamos estar, quedamos cuatro gatos, imaginad lo que podría haber sido y lo que debe andar enterrado por ahí a la espera de ser descubierto. En la próxima entrega, más.